La Unión Europea intensifica su enfoque hacia la inteligencia artificial (IA) con el anuncio de una inversión adicional de 1.300 millones de euros, sumándose a los 150.000 millones de euros previamente comprometidos para no rezagarse frente a potencias como Estados Unidos y China. Este nuevo impulso financiero busca potenciar la adopción de IA en negocios y administraciones públicas, al tiempo que refuerza las capacidades en servicios de nube y ciberresiliencia. Está enfocado en áreas estratégicas dentro del Programa Europa Digital para 2025-2027, tales como la experimentación con entornos inmersivos o «mundos virtuales», la aplicación de la Ley de IA, el desarrollo de espacios comunes de datos que respeten la eficiencia energética, entre otros objetivos.
El despliegue de esta inversión se dirige a acelerar la transición digital de Europa mediante la promoción de proyectos de IA generativa, ciberseguridad, mejora de los servicios públicos digitales y la implementación de una nueva identidad digital europea. La Comisión Europea lanzará las primeras convocatorias del programa en abril de 2025, invitando a entidades a presentar propuestas con objetivos sólidos y planes de ejecución detallados.
Además, se busca fortalecer la autonomía tecnológica de Europa, disminuyendo la dependencia de soluciones extranjeras en tecnología e impulsando iniciativas como la Ley de Chips para abordar la escasez de semiconductores. Sin embargo, este enfoque hacia la regulación de la IA ha suscitado críticas por parte de expertos y líderes políticos que consideran que podría frenar la innovación al ser demasiado restrictiva, en un momento crítico de competencia global. Europa se esfuerza, por ello, en equilibrar la regulación con la promoción del desarrollo y adopción de IA para asegurar su soberanía digital y competitividad en el futuro.
