hay acusaciones de amenazas y chantaje a los medios especializados

NVIDIA introdujo sus tarjetas gráficas RTX 5060 el 19 de mayo, tras un anuncio previo. Estas tarjetas, aunque no tan poderosas como otras de la misma familia, destacan por su tecnología DLSS 4 y suponen una opción asequible para presupuestos limitados. Sin embargo, el lanzamiento se vio empañado por una estrategia polémica que dificultó su análisis por parte de expertos, coincidiendo con la feria Computex en Taiwán, lo que limitó el acceso a muestras de evaluación. NVIDIA complicó aún más la situación al no proporcionar controladores necesarios para el funcionamiento óptimo de las tarjetas, y, en algunos casos, limitó los análisis a cinco juegos específicos bajo condiciones que favorecían a las RTX 5060, llegando incluso a amenazar a medios y youtubers que no se adhirieran a sus directrices.

Esta práctica de intentar controlar la narrativa en torno a sus productos ha generado preocupación en cuanto a la transparencia y la honestidad de NVIDIA. A pesar de estas tácticas, análisis independientes han surgido, revelando que las tarjetas RTX 5060 podrían ser menos impresionantes de lo sugerido, comparándolas con versiones anteriores pero a un costo reducido y dependiendo fuertemente de la tecnología DLSS4 para destacar.

El incidente ha puesto en cuestión el enfoque de NVIDIA hacia el mercado gamer y su transparencia, suscitando debate sobre la ética de tales estrategias de marketing y la real valía de sus productos en un mercado competitivo que incluye alternativas de AMD e Intel. Este enfoque puede afectar negativamente la reputación y el dominio de mercado de NVIDIA, en un momento en que las alternativas se vuelven más atractivas para los consumidores. La situación indica una posible necesidad de reevaluación de estrategias por parte de NVIDIA para mantener su posición en el ámbito del gaming.