MetaX, una emergente empresa china fabricante de GPUs destinadas a entrenar y ejecutar modelos de inteligencia artificial (IA), ha experimentado un deslumbrante debut en el mercado de valores, replicando el asombroso éxito de otra compañía del país, Moore Threads. En una notable jornada de negociación, el precio de las acciones de MetaX se catapultó de 104,66 yuanes a 824,50 yuanes, un aumento del 688%, valorizando a la empresa en casi 40.000 millones de dólares. Este fenómeno subraya el creciente interés por desarrollar alternativas nacionales a los chips de NVIDIA en el contexto de una China que busca fortalecer su independencia tecnológica en el sector de la IA.
MetaX fue fundada por antiguos empleados de AMD, y se especializa en el diseño de GPUs bajo el modelo ‘fabless’, es decir, sin fábricas propias, y sus productos son fabricados por terceros como TSMC en Taiwán. La compatibilidad con CUDA, la plataforma de programación de NVIDIA, es una de las características destacables de sus productos, permitiendo la ejecución de software existente sin necesidad de reescribir código.
A pesar de que su tecnología aún no iguala a la de NVIDIA, MetaX ha logrado avances significativos; por ejemplo, su GPU C500 ofrece alrededor del 75% de la potencia de la NVIDIA A100. Sin embargo, MetaX, al igual que Moore Threads, enfrenta el desafío de aún no generar ingresos significativos, con pérdidas notables pese a un aumento impresionante en la facturación año tras año.
Este escenario revela el enorme potencial y las expectativas depositadas en el desarrollo de la IA en China, a la vez que evidencia los retos financieros y tecnológicos que las compañías emergentes deben superar en su camino para competir en este mercado altamente competitivo.