En 2023, la Inteligencia Artificial (IA) generativa ha experimentado una expansión masiva, especialmente tras el lanzamiento de ChatGPT a finales de 2022. Las compañías tecnológicas están consolidando sus iniciativas alrededor de este tipo de IA, siguiendo principalmente dos enfoques: la integración de IA en dispositivos de manera local y el ofrecimiento de servicios basados en la nube. La IA generativa local promete mayor privacidad y menos dependencia de conexiones a internet estables, beneficiando tanto a usuarios como a fabricantes mediante la reducción de costes en infraestructura de red. En contraste, la IA en la nube externaliza el procesamiento fuera del dispositivo, necesitando una conexión a internet y aumentando los costos para los proveedores como OpenAI o Anthropic debido al uso intensivo de banda ancha.
Empresas como Google y Apple están invirtiendo en IA local para mejorar la experiencia del usuario en dispositivos con Android y iOS, respectivamente, sin incrementar los costes de operación en la nube. Google ha anunciado Gemini Nano para realizar tareas sencillas en smartphones, mientras que Apple apunta a mejorar las capacidades locales de sus dispositivos, siguiendo la evolución de Siri hacia un funcionamiento más autónomo. A pesar de estas iniciativas, la implantación local de IA requiere de cierto conocimiento técnico y hardware avanzado, accesible a través de herramientas como Ollama o la integración de modelos de lenguaje amplios (LLMs) en Opera.
En el ámbito de la nube, Google y OpenAI buscan atraer a usuarios mediante suscripciones a servicios premium como Gemini Advanced y ChatGPT Plus, respectivamente. Apple, consciente de que no puede limitarse solo al procesamiento local, se prepara para usar tanto servidores propios como colaboraciones externas para gestionar la IA generativa. Otras compañías como Meta y Microsoft también dependen de la nube para impulsar sus servicios, con Meta enfocándose en sus aplicaciones y Microsoft en potenciar sus productos establecidos a través de Azure, su infraestructura en la nube.
La diversificación de enfoques hacia la IA generativa marca un año de avances tecnológicos, con empresas adaptando estrategias para optimizar la funcionalidad, coste y accesibilidad de la IA, sea a través de dispositivos locales o servicios basados en la nube.
