La Universidad de Wisconsin-Madison ha realizado un avance significativo hacia el desarrollo de energía limpia a través de la fusión nuclear con un dispositivo compacto llamado WHAM (Wisconsin HTS Axisymmetric Mirror). Este equipo, trabajando por cuatro años, ha logrado crear plasma de hidrógeno usando el campo magnético más potente aplicado en este tipo de dispositivos, alcanzando los 17 Tesla, duplicando la fuerza de los escáneres de resonancia magnética y marcando un récord en el confinamiento de plasma. El éxito de WHAM radica en su uso de imanes superconductores de alta temperatura (HTS), que permiten generar un campo magnético considerablemente fuerte.
El dispositivo utiliza un concepto conocido como «espejo magnético» para contener plasma, una técnica que comprime plasma dentro de una cámara cilíndrica con poderosos imanes situados en cada extremo. Estos imanes hacen que los iones de hidrógeno colisionen al ser comprimidos y rebotar, incrementando así las posibilidades de fusión nuclear. Este enfoque revitaliza una teoría desarrollada en los años 80, que no pudo implementarse efectivamente hasta la reciente mejora en la tecnología de superconductores.
WHAM se gestiona como una cooperación entre la Universidad de Wisconsin-Madison y Realta Fusion, una firma enfocada en la comercialización de la tecnología de fusión con espejo magnético. Con una inversión de más de 10 millones de dólares del Departamento de Energía de EE. UU., el proyecto promete una alternativa más económica y compacta para la generación de energía libre de carbono. Aunque el proyecto ha marcado un desarrollo significativo, enfrenta desafíos relativos a la estabilidad del plasma, su confinamiento prolongado y la eficiencia del dispositivo en general. Los futuros hallazgos serán fundamentales para determinar si esta tecnología puede ser un método práctico y viable para la producción de energía limpia, con un impacto potencial considerable en la lucha contra el cambio climático.
