Shenzhen se ha destacado como un importante centro tecnológico en China, hogar de gigantes como Huawei, Tencent o DJI. Sin embargo, Hangzhou está emergiendo como el nuevo Silicon Valley chino, impulsado especialmente por el auge de la inteligencia artificial (IA). Jack Ma posicionó a Hangzhou en el mapa tecnológico al establecer allí Alibaba, lo que atrajo inversores y fomentó una cultura tecnológica. Muchos ex empleados de Alibaba han iniciado sus propias empresas, contribuyendo al ecosistema de startups. Alibaba Cloud ha desempeñado un papel crucial en este desarrollo con sus ocho centros de datos en la región.
Hangzhou es también conocida por albergar a los «Six Little Dragons», un grupo de las empresas de IA más innovadoras de China. La Universidad de Zhejiang, apodada la «Stanford del este», ha sido fundamental en formar a líderes en este sector, con ejemplos notables como DeepSeek, Manycore y Deep Robotics naciendo de sus aulas. Hasta septiembre de 2024, se reportó que 102 ejecutivos de startups chinas de IA son exalumnos de esta universidad.
El apoyo gubernamental ha sido clave en el desarrollo tecnológico de Hangzhou. El gobierno ofrece préstamos a los estudiantes emprendedores y asistencia en caso de fracaso, además de proporcionar ayuda con el alquiler de oficinas y licencias para nuevas empresas. Esto ha permitido a startups como Game Science y BrainCo prosperar en la ciudad.
Otro factor que distingue a Hangzhou es su eficiencia administrativa, implementando la iniciativa «una visita como mucho» que simplifica el papeleo para las empresas. Estos esfuerzos han culminado en un crecimiento significativo de la industria tecnológica de Hangzhou, que registró un aumento del 7.1% en 2024, contribuyendo con un tercio al producto interior bruto de la ciudad. Este auge refleja la ambición de China de liderar en el sector de la IA, fomentando una rivalidad interna entre sus ciudades por la innovación tecnológica.