Lo que comenzó como ciencia ficción en la película ‘Real Steel’ en 2011, se ha materializado en China más de una década después con la celebración de una competición de kickboxing entre robots humanoides. El evento, que se llevó a cabo en Hangzhou, fue organizado por China Media Group y transmitido en vivo, evidenciando el avance tecnológico del país en el campo de la robótica. Los protagonistas fueron cuatro robots G1 de Unitree Robotics, quienes demostraron habilidades sorprendentes como agilidad, fuerza, coordinación y la capacidad de levantarse sin ayuda tras ser derribados.
El torneo constó de combates uno contra uno, con reglas específicas como tres asaltos de dos minutos y puntuaciones basadas en golpes válidos. El robot manejado por el influencer Lu Xin se alzó campeón, pero la competencia dejó en claro que lo impresionante no era solo la existencia de estos combates, sino las capacidades desarrolladas por estos autómatas.
Además de los sorprendentes duelos, se destacó la complejidad técnica de los G1, con especificaciones tales como cámara de profundidad Intel RealSense, sensor 3D LiDAR, motores con alto par máximo, autonomía de batería para dos horas de actividad y capacidades de conectividad avanzadas. Fueron diseñados para resistir impactos y para mantener el equilibrio incluso después de recibir golpes, demostrando avances significativos en robótica que superan el mero entretenimiento.
Este hito en China no solo evidencia el liderazgo del país en el desarrollo de tecnología robótica, sino que también marca el comienzo de una nueva era en el entretenimiento y el potencial utilitario de los robots humanoides. Mientras tanto, China se prepara para nuevas competiciones y eventos multideportivos con robots, al tiempo que empresas como Huawei y UBTech avanzan hacia la integración de estos autómatas en la vida cotidiana. Este tipo de innovaciones destacan no solo el espectáculo, sino la funcionalidad y la promesa de lo que la robótica puede ofrecer a la humanidad en el futuro próximo.