Por primera vez en casi dos décadas, Apple ha conseguido liderar el mercado global de smartphones en el primer trimestre del año, superando a Samsung y colocándose por delante de Xiaomi. Este logro, analizado por Counterpoint Research, se atribuye a una estrategia de lanzamiento poco convencional, un crecimiento robusto en mercados emergentes, y un comportamiento sólido globalmente, justo antes de los desafíos impuestos por la guerra arancelaria liderada por Estados Unidos.
Apple alcanzó una cuota de mercado del 19%, con un incremento del 4% en unidades vendidas respecto al año anterior, mientras que Samsung se quedó con un 18%, experimentando una caída del 5% en sus ventas. Xiaomi mantuvo la tercera posición, mostrando un crecimiento constante y alcanzando el 14% del mercado.
Un factor clave en este éxito ha sido el lanzamiento del iPhone 16e en febrero, que, a pesar de las críticas por su relación calidad-precio, ha tenido una excelente acogida en el mercado. Este modelo, más accesible pero con hardware avanzado, destaca por su compatibilidad con Apple Intelligence, indicando una estrategia dirigida a un público más amplio.
A nivel global, el mercado de smartphones creció un 3% interanual en este trimestre, impulsado principalmente por China gracias a las subvenciones públicas y la reactivación de la demanda en mercados emergentes como India, el Sudeste Asiático y América Latina. No obstante, se observan signos de saturación en mercados como Europa, Estados Unidos y la propia China.
Samsung experimentó un repunte en ventas tras el lanzamiento del Galaxy S25, y Xiaomi continuó su expansión tanto en mercados nuevos como en China. Vivo y OPPO también mostraron crecimientos notables, lo que refleja un panorama competitivo cada vez más diverso y disputado.
El horizonte muestra tensiones debido a los potenciales nuevos aranceles por parte de Estados Unidos, lo que ha llevado a varias marcas, incluida Apple, a buscar medidas para mitigar su impacto, evidenciando un clima de incertidumbre en el sector.
