Europa busca adquirir paneles solares sin trabajo forzoso, enfrentando el desafío de que la mayoría provienen de China, país que domina la cadena de suministro de estos componentes. En este contexto, China, a través de Zijin Mining Group, amplía su influencia en el mercado de metales preciosos al abrir a inversores profesionales su primer fondo de streaming minero en Hong Kong, estrategia que le permite financiar minas obteniendo derechos sobre su futura producción sin necesidad de gestionarlas directamente. Zijin busca asegurar el suministro de oro y cobre, fundamentales para el desarrollo de tecnologías y la transición energética, ante una oferta decreciente de reservas de alta calidad y una creciente demanda impulsada por la incertidumbre geopolítica y económica.
La empresa ha reconfigurado su modelo de negocio, permitiendo la inversión externa en estos metales estratégicos y planificando futuras cotizaciones bursátiles para su división internacional. Además, ha firmado acuerdos de streaming con minas en diversos lugares, incluyendo Africa y Sudamérica, fortaleciendo su capacidad de asegurar un suministro constante de estos recursos valiosos.
Este movimiento tiene implicaciones más amplias, reflejando la ambición de China de controlar recursos críticos relevantes para la soberanía tecnológica y energética a nivel global. Mientras otras regiones como Occidente debaten políticas de descarbonización y relocalización industrial, China avanza en asegurar el control sobre los metales fundamentales para el futuro energético y tecnológico. Este enfoque no solo tiene implicaciones económicas sino también geopolíticas, posicionando a China en un lugar ventajoso en el mapa de la seguridad y la infraestructura global de tecnología avanzada.
