La llegada de la inteligencia artificial generativa, especialmente con la popularización de ChatGPT en noviembre de 2022, inicialmente generó preocupación en el ámbito educativo. Temores como el aumento de plagios, la propagación de contenidos sesgados y la posibilidad de que disminuyera el pensamiento crítico entre los estudiantes llevaron a instituciones en lugares como Nueva York a prohibir su uso en las escuelas. En Europa, las respuestas variaron desde la prohibición en Francia y España hasta la integración en Dinamarca y la creación de guías en Berlín.
A pesar de las preocupaciones iniciales, con el tiempo la percepción ha comenzado a cambiar hacia una visión más optimista. El Departamento de Educación de Nueva York revirtió su prohibición en mayo, reconociendo el potencial de la IA en la educación y buscando maneras de sacar provecho de la tecnología. En España, el INTEF publicó un análisis destacando la necesidad de adaptar los sistemas educativos a esta nueva ola tecnológica.
Profesores en España, como Domingo Chica y María del Carmen Giraldo, están explorando formas creativas de integrar la IA para personalizar el aprendizaje, mejorar la productividad y ofrecer apoyo extra a los estudiantes. Herramientas como Matthew y Twee permiten a los profesores generar materiales adaptados y resolver dudas específicas de los estudiantes, superando así algunos de los retos tradicionales de la educación, como la falta de personalización y recursos.
Reconocidos investigadores en educación, como Mariano Fernández Enguita, sugieren que la IA podría actuar como un tutor o compañero de aprendizaje, rompiendo con el modelo tradicional de enseñanza y permitiendo un aprendizaje más interactivo. Aunque hay docentes que siguen mostrando resistencia, otros ven en la IA una oportunidad inigualable para enriquecer y facilitar el proceso educativo.
Este cambio de actitud refleja una adaptación gradual de la comunidad educativa hacia las tecnologías generativas, pasando de la preocupación inicial a reconocer sus potenciales beneficios educativos. La expectativa es que, con una implementación cuidadosa y creativa, la IA pueda contribuir significativamente a superar algunos desafíos históricos de la educación, como la escasez de recursos y la necesidad de una enseñanza más personalizada.
