la técnica de Steve Jobs que usaba inteligencia emocional cuando nadie hablaba de ella

Steve Jobs, un icónico líder de la industria tecnológica, cautivó tanto a admiradores como a rivales con su excepcional habilidad para comunicar, despertando el asombro incluso de competidores como Bill Gates. Su mayor don residía en el dominio de la inteligencia emocional aplicada a la comunicación, una competencia extraordinariamente valorada en el mundo empresarial. Jobs sabía que el éxito de sus mensajes no dependía únicamente de lo que decía, sino cómo lo decía, enfatizando el poder de la no verbalidad en su expresión. Su enfoque en la actitud, el tono, y la postura trasladaba confianza y credibilidad durante sus inolvidables discursos y presentaciones.

La base científica de sus técnicas de comunicación surge de estudios como el de Albert Mehrabian y Morton Wiener, quienes demostraron la importancia del lenguaje no verbal en la percepción y comprensión de los mensajes. Además, la investigación de la Universidad de Oxford subraya que el 80% de la información que compartimos al comunicarnos es no verbal, reforzando la efectividad de las estrategias de Jobs.

Más allá de la comunicación no verbal, Jobs excelió en el arte del storytelling, transformando presentaciones de productos en narrativas cautivadoras que atraían al público y creaban necesidades. Este uso magistral de la narrativa, respaldado por investigaciones sobre cómo conectan nuestro cerebro con las historias, fue clave en el éxito de lanzamientos emblemáticos como el iPhone en 2007, cambiando el rumbo de la industria móvil.

La habilidad de comunicar de Steve Jobs, basada en la inteligencia emocional, el lenguaje corporal, y un eficaz storytelling, no solo dejó una marca indeleble en Apple, sino que también estableció nuevos estándares para la presentación de productos y la comunicación corporativa, demostrando que la manera en que compartimos nuestro mensaje puede ser tan revolucionaria como el contenido mismo.