Las paradas de Barcelona tendrán IA. Y mejorarán la seguridad mientras se espera el autobús

A partir de febrero de 2025, Barcelona experimentará con una nueva generación de paradas de autobús, diseñadas para mejorar la experiencia de transporte público a través de la tecnología de vanguardia proporcionada por BusPas Inc., una empresa canadiense. Estas innovadoras paradas, que serán implementadas como una prueba piloto en 15 paradas cerca de Plaça Catalunya, no solo ayudarán a los pasajeros con información actualizada y personalizada gracias a pantallas alimentadas por energía solar y algoritmos de inteligencia artificial, sino que también fomentarán un entorno urbano más seguro y eficiente.

La esencia de estos puntos de tránsito inteligentes se centra en su capacidad para analizar y reaccionar al ambiente circundante. Equipadas con sensores y cámaras, estas paradas pueden monitorizar el tráfico y la ocupación de los autobuses, ofreciendo recomendaciones de itinerario y opciones de rutas alternativas a través de una aplicación. Además, se contempla su uso como estaciones de recarga eléctrica para dispositivos menores.

Este proyecto está impulsado por NVIDIA Metropolis, una suite de herramientas avanzadas para el análisis de datos visuales que busca transformar las paradas de autobús en nodos de control y recolección de información, contribuyendo a la gestión de la ingeniería de tráfico y los servicios de transporte público.

La funcionalidad de estas paradas incluye la mejora de la seguridad mediante la activación automática de luces cuando detectan presencia humana por la noche, lo que no solo proporciona tranquilidad a los viajeros sino que también mejora su visibilidad para los conductores de autobús. A nivel de accesibilidad, se incorporará un sistema de asistencia auditiva para que las personas con dificultades auditivas puedan recibir la información necesaria.

Este enfoque innovador hacia las paradas de autobús refleja un esfuerzo por adaptar la infraestructura urbana a las necesidades de una sociedad cada vez más dependiente de la tecnología y consciente del medio ambiente, manteniendo al mismo tiempo un espíritu de inclusión y seguridad para todos los usuarios del transporte público.