En Estados Unidos, en medio de una vibrante campaña electoral, los principales actores financieros están alineando sus estrategias para beneficiarse independientemente del resultado electoral. Este panorama ha sido ampliamente cubierto por medios como The New York Times, destacando los movimientos financieros en anticipación a los resultados electorales.
Elon Musk, considerado como la persona más rica del mundo, ha advertido sobre una inminente crisis de deuda pública en EE. UU. que podría disparar los tipos de interés, aumentar la inflación, y fortalecer el bitcoin y el oro como activos refugio. Esta situación ha llevado a un incremento notable en la cotización tanto del bitcoin como del oro, considerados como seguros ante la incertidumbre económica.
Además, Musk ha señalado la situación actual de la deuda de EE. UU., que alcanzó un nuevo récord de 35.669 billones de dólares al inicio del nuevo año fiscal, como una señal alarma, argumentando que el país se dirige a la bancarrota si no se toman medidas significativas.
Los inversores han reaccionado ante esta incertidumbre financiera y el clima electoral buscando refugio en activos como el bitcoin y el oro. Esta tendencia ha sido reforzada por la perspectiva de que ni demócratas ni republicanos están abordando de manera adecuada el creciente problema de la deuda y déficit de EE. UU.
Asimismo, la deuda estadounidense ha experimentado un crecimiento acelerado debido a las medidas de estímulo implementadas durante la pandemia de COVID-19 bajo la administración Biden, lo que llevó a un ciclo inflacionario que la Reserva Federal ha intentado mitigar mediante ajustes en las tasas de interés.
En este contexto, Musk también ha expresado su interés en los efectos de la deuda pública sobre el precio de las criptomonedas, particularmente en cómo afecta al valor del bitcoin, un activo estratégico para Tesla. La empresa ha acumulado unos 10.000 bitcoins, lo que convierte a Tesla en uno de los mayores tenedores corporativos de esta criptomoneda en EE. UU., considerándolo un "oro digital" frente a la inflación.
Este complejo panorama financiero y electoral en EE. UU. refleja la intersección entre la política, la economía y los mercados de criptomonedas, con figuras como Elon Musk jugando roles clave en la interpretación y respuesta a estas dinámicas.