no voy a dejarles aprovecharse de nuestras compañías

Durante la reciente campaña electoral, Donald Trump ha destacado por sus llamativas promesas y su contacto directo con los gigantes tecnológicos. Un evento particularmente notable fue una llamada inesperada de Tim Cook, el CEO de Apple, quien discutió con Trump sobre las significativas multas impuestas a Apple por la Unión Europea, que suman más de 14 mil millones de euros entre dos sanciones, una por un caso relacionado con Spotify y otra por impago de impuestos. Trump reveló en una entrevista que Cook considera que estas multas representan un intento de la UE por controlar a Apple.

Trump, mostrando una clara postura protectora hacia las empresas estadounidenses, prometió que no permitirá que la UE «se aproveche» de firmas como Apple si resulta reelecto. Este mensaje se alinea con sus comentarios anteriores sobre Google en una entrevista con Bloomberg TV, donde mencionó su conversación con Sundar Pichai sobre el contenido negativo en el buscador. Además, Trump ha mantenido comunicación con otras figuras relevantes de la tecnología como Elon Musk y Mark Zuckerberg, señalando su interés en ganarse el apoyo de las grandes corporaciones tecnológicas para su campaña.

Este acercamiento con las Big Tech refleja la táctica de Trump de asegurar alianzas estratégicas dentro del sector tecnológico, elemento clave para entender su campaña y futuras políticas si es reelegido. Esta aproximación también subraya la creciente interacción entre la política y la tecnología, especialmente en temas de regulación y operación internacional de las corporaciones tecnológicas.