OpenAI ha iniciado un proyecto confidencial denominado «Proyecto Mercury», con el objetivo de capacitar a sus modelos de inteligencia artificial (IA) para realizar tareas financieras complejas. Según información de Bloomberg, OpenAI ha contratado a más de 100 ex empleados de destacados bancos de inversión, como JPMorgan Chase, Morgan Stanley y Goldman Sachs, para entrenar a la IA en la construcción de modelos financieros, un proceso que tradicionalmente consume mucho tiempo de los analistas junior.
Estos contratistas están siendo remunerados con 150 dólares por hora para desarrollar modelos financieros variados, desde reestructuraciones corporativas hasta ofertas públicas iniciales, y tienen acceso anticipado a la IA que OpenAI está preparando para reemplazar este tipo de trabajo financiero. Además, el proceso de selección para estos contratistas es altamente automatizado, incluyendo una entrevista inicial con un chatbot de IA y diversas pruebas técnicas.
A pesar de la enorme valoración de OpenAI, que recientemente alcanzó los 500.000 millones de dólares, la empresa aún enfrenta desafíos para alcanzar la rentabilidad, debido a grandes inversiones en proyectos y el mantenimiento de costosos centros de datos. La implementación de IA en tareas financieras representa una potencial nueva fuente de ingresos para OpenAI, permitiéndoles incursionar en sectores clave como la consultoría y las finanzas.
La automatización en la banca de inversión podría aliviar la carga de trabajo de los analistas, que suelen exceder las 80 horas semanales. Sin embargo, algunos expertos sugieren que, más que eliminar empleos, la IA transformará el conjunto de habilidades requeridas para estos roles. OpenAI ya tiene lazos significativos con el sector financiero, con empresas como Morgan Stanley utilizando su tecnología, y ha obtenido un crédito significativo de JPMorgan Chase, que también aspira a convertirse en el primer «megabanco completamente impulsado por IA» del mundo.