Qué fue del NS Savannah, el primer buque mercante de propulsión nuclear del mundo

Actualmente, estamos observando un notable incremento en el interés y la inversión hacia la energía nuclear, marcando lo que parece ser un renacimiento de esta fuente de energía. Reactores existentes están siendo reabiertos, y nuevas unidades están siendo desarrolladas, destacándose los diseños de reactores modulares pequeños (Small Modular Reactors, SMR) por su innovación y capacidades vanguardistas. Grandes compañías tecnológicas como Amazon y Google han decidido explorar estas tecnologías nucleares avanzadas para alimentar algunos de sus centros de datos de inteligencia artificial, mientras Maersk, una de las mayores navieras del mundo, investiga la viabilidad de operar buques mercantes propulsados nuclearmente.

A mediados de este año, Maersk inició un estudio en colaboración con Lloyd’s Register y Core Power, para analizar la factibilidad de una flota de barcos de carga nuclear. No sería la primera vez que un buque mercante opera con energía nuclear; de hecho, ha habido cuatro proyectos de este tipo, siendo el NS Savannah, construido en 1959, el primero de ellos.

El NS Savannah fue una iniciativa de Estados Unidos bajo la administración de Dwight D. Eisenhower, bajo el programa «Átomos para la Paz», diseñado para demostrar las aplicaciones pacíficas de la energía atómica. Este buque, con un diseño de lujo y comodidades poco comunes para su tiempo, estaba equipado con un reactor de agua a presión diseñado por Babcock & Wilcox, similar al del submarino USS Nautilus. Operó principalmente como un símbolo ambulante de la energía atómica pacífica, aunque nunca fue pensado para ser rentable, y su actividad comercial cesó a principios de los 70.

Después de años en exhibición, el NS Savannah fue designado como Monumento Histórico Nacional en 1991 y actualmente se encuentra en Baltimore, en proceso de desmantelamiento de sus sistemas nucleares. La Administración Marítima de Estados Unidos contempla su futuro, incluyendo la opción de convertirlo en museo. Este resurgimiento de la energía nuclear y el interés en aplicaciones como el transporte marítimo nuclear reflejan un cambio en la percepción y la valoración de la energía nuclear como una fuente de energía limpia y viable a largo plazo.