El análisis del LG Gram Pro refleja cómo una línea de portátiles inicialmente diseñada para ser ligera y portátil ha evolucionado hasta convertirse en una referencia para aquellos usuarios que buscan un equilibrio entre movilidad y potencia. Esta nueva iteración, el LG Gram Pro, amplía la propuesta de la marca al incluir modelos con tarjeta gráfica dedicada, como la RTX 3050, y una pantalla externa que, juntas, ofrecen una experiencia de doble monitor sin significar un exceso de peso, manteniéndose por debajo de los dos kilogramos.
En lo que respecta a sus especificaciones, el LG Gram Pro 16Z90SP viene equipado con una pantalla de 16 pulgadas OLED de resolución 2880×1800 píxeles y frecuencia de 120 Hz, un procesador Intel Core Ultra 7 155H, 32 GB de memoria LPDDR5, integración de gráficos Intel Iris Arc más una Nvidia RTX 3050 de 4GB, y almacenamiento SSD de 512 GB ampliable. A esto se suman capacidades de conectividad y puertos diversos, destacando el WiFi 6E y los puertos USB 4 Gen 3×2 Tipo-C, entre otros. También cuenta con un sistema de sonido Dolby Atmos, batería de 90 Wh, y viene con Windows 11 como sistema operativo.
El diseño sobrio y la construcción en aleación de magnesio y carbono definen su aspecto, ofreciendo una experiencia ligera pero robusta, con la certificación militar STD-MIL 810G como garantía de durabilidad. Sin embargo, su diseño podría resultar algo básico para ciertos usuarios.
Una pantalla OLED se destaca por su calidad, especialmente pensada para creativos, aunque su brillo máximo podría ser insuficiente en entornos muy iluminados debido a su acabado brillante. El equipo también incluye una webcam FullHD con sensores IR para Windows Hello, aunque carece de identificación por huella dactilar.
Una de las novedades más interesantes es la incorporación del procesador Intel Core Ultra 7 y la opción de tener una gráfica dedicada, lo que eleva el perfil de uso del portátil hacia tareas más exigentes como la edición de contenido multimedia, a la vez que mantiene la posibilidad de un uso lúdico ocasional gracias a un rendimiento gráfico adecuado para juegos actuales.
En términos de autonomía, el LG Gram Pro cumple con creces ofreciendo entre 8 y 10 horas de uso real, destacando en este aspecto frente a otras opciones del mercado. El teclado y touchpad, por su parte, proporcionan una experiencia de uso cómoda y eficiente, aunque el espacio concedido al teclado numérico pudiera ser motivo de debate.
Culminando el análisis, se destaca la combinación del LG Gram Pro con la pantalla externa Gram +view, configurando una solución de doble pantalla excepcionalmente portátil y práctica. Este conjunto, junto a las prestaciones generales del portátil, sitúa al LG Gram Pro como una opción muy atractiva para profesionales y usuarios exigentes que buscan un equipo capaz, sin renunciar a la portabilidad. Con una nota general de 9 sobre 10, el LG Gram Pro se presenta como un dispositivo altamente recomendable.